Cuando vivía en Africa, pensaba que ningún otro lugar del mundo podría ser tan pobre, y, sin embargo, ese lugar era Honduras. Jamás mis ojos vieron tanta pobreza, tanta necesidad, pero al mismo tiempo, tantas ganas por salir de ella, tanta gente joven luchando codo a codo por hacer de esta pobreza un recuerdo lejano.
Desde que llegamos, no paramos de llorar, emocionados...con un sentimiento de impotencia, pero al mismo tiempo, de fuerza, porque tenemos que ayudar a esta gente. Nos necesitan. No os podéis imaginar lo que el padre Patricio ha hecho aquí. De verdad. Es increíble. Toda esta gente come, estudia...lleva una vida digna gracias a él. Y a tanta gente joven, a la que un día sacó de la miseria, y , que ahora, ayudan a sacar su proyecto adelante.
Estuvimos en Casa Zulema, la casa de los enfermos de sida.....Nos recibió Cristian , un niño de 14 años, medio ciego, y que no mide más de de 1,20 m...Cómo nos recibió !!! Cómo se alegró de " vernos " allí...!!! Niñas de 12 años violadas y madres ya....Viejitas con sida abandonadas por sus familias, y a quien Doña Laura ( UN ANGEL ) ayuda, cuida, lava, alimenta....y con una sonrisa perenne.
Por Dios, habrá un antes y un después en mi vida después de este viaje. Cuánta gente buena hay en el mundo...cuánta gente dispuesta a dar su vida, su tiempo...por ayudar a los demás...!!! Qué gran ejemplo de vida. Todo esto nos ha sobrepasado, a todos....Pero no por ello ha mermado nuestras fuerzas. Tenemos que ayudarles.
Cuando los chicos saben que eres " maestro", sus ojos comienzan a brillar y abren sus bocas , con cara de asombro, como queriendo gritar " Qué bien, qué suerte, ayúdennos, enseñénnos cómo hacer, cómo saber....por favor ...!!!!
Qué lección de vida para todos nosotros....Qué lección de supervivencia, de amor...de mucho amor incondicional...!!!
Fetin
Es inevitable que al leer y reflexionar vuestros relatos el sentimiento primario que aflora es de culpabilidad. Esta culpabilidad puede generar tres sentimientos:
ResponderEliminarPASIVIDAD: es tal la impotencia antes los hechos que nos cuenta, que pienso en lo mucho por cambiar, y que además compromete tanto que uno se bloquea; “no sé puede hacer nada desde este primer mundo” o “si estuviéramos allí…”. Pero aquí se acaba la historia.
AGRESIVIDAD: esa realidad es tan diferente y tan doliente que agrede, y se reacciona de forma violenta; culpando a ello de todos sus males, utilizando el tópico de:”la culpa la tiene ellos por su forma de ser y por supuesto sus políticos”.
GRATITUD: desde esa realidad tan diferente y doliente hasta nuestro primer mundo, me brota un sentimiento de agradecimiento al reconocer tantos dones materiales y espirituales que tenemos a nuestro alcance de forma gratuita y de forma inexplicable. Estos dones se convierten, desde la FE, en una fuente para cambiar y trasformar lo más próximo, lo más inmediato dentro de nuestra vida diaria y rutinaria. Si tenemos esta experiencia, entregarse a los demás y no juzgar, llegaríamos a ser “Humildes, también de corazón” como vuestra familia de Hondura.
Os pido que transmitáis a vuestra familia de Hondura las gracias por darme una lección de experiencia cotidiana de Dios, sencilla, sin ruidos, simplemente vida vivida plenamente. También os pido que transmitáis las súplicas, a nuestro Dios que todo lo puede, para que sus condiciones materiales mejore y se acerque a un nivel de dignidad humana.
GRACIAS por estar ahí, Fetin
¡¡Mi querida Fetin!! ¡¡Cuánta emoción en tu comentario!! ¡¡Me he sentido muy unida a vosotros en este tiempo de gracia que habéis disfrutado!! Gracias, gracias, gracias.
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